jueves, 6 de marzo de 2014

CUANDO MUERE UNA ILUSIÓN

Cuando ausente de agua y lluvia
el mes de abril comienza desganado,
no pintará mayo la pradera
ni moraga de trigo llenará la mano,
pues retorcido otoño se presenta
si al segar, la mis no pierde grano.

Recuriré a la sombra de la encina
en busca del fruto decreciddo.
Espiaré zarzas y espinoos vendimiando,
que la escarcha de octubre se aproximma
y el invierno conviene recordar,

porque nunca me embriagó la primavera
ni aposté jamás por el verano,

¿Qué cosecha puedo yo esperar
si segué forraje y aborté el grano?

Desolado, con la esperanza a medias,
y paladeando el sabor de la incertidumbre,
abogo em septiembre por la sementera,
que no hay más bracero que mi tesón 
ni más semilla que la justa en mi condena.

Cuanto más aprieto el puño
más simiente gano,
pues cubrir la amelga a toda costa intento
pateando surco a surco de manera
que, ni el sudor que cuesta
la recolección pretexto,
ni el olor a parva que se palpa me envenena.

Puse toda la ilusiónen cada sementera,
más hoy recojo con mano yerta
la semilla que el mijo del sol atempera,
y que será a todas luces un evento vano,
de bracero, tesón, puño y sementera,
puesto que si mal grana
la ilusión se muere cuando vive,
cuando vive y cuando muere.

Cuando muere una iluusión no nace rosa
si se suple por forrje el tierno grano.





2 comentarios:

  1. Los errores que cometemos cosechan luego desengaños y desilusiones. Me gusta como lo expones en forma de cosecha, sembrado, labrador, etc.
    Abrazos

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  2. Me ha tocado el alma pues me he visto reflejada. Gracias por compartir.
    Un besito cielo.

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